‘Lo que es interesante del arte, en su íntima ligazón con la vida, es la búsqueda de la esencia detrás del polvo, de la espuma y del algodón de los días’.
Claudia Galhós, 2006
Dos artistas gallegas, con un trazo salvaje, íntimo y delicado, fusionan universos artísticos para MERCEDES E EU, una creación colaborativa que ensalza el vínculo entre lo común y lo transcendental. Ellas son Janet Novás y Mercedes Peón, coreógrafa y compositora respectivamente, dos mujeres con fuerza visceral y dedos afilados de larga trayectoria.
Janet Novás lleva más de diez años como creadora y bailarina de sus propios trabajos, en muchas ocasiones bajo el formato solo y vertebrados por una idea de cuerpo que ha ido evolucionando al largo de su trayectoria. Las piezas de Novás se construyen por experiencia radical y en ella encontramos un continuo: la emoción solo aparece cuando una se mueve. Por su parte, Mercedes Peón es considerada una de las grandes figuras musicales del folk gallego contemporáneo, se resiste con sus creaciones sonoras a una catalogación firme. Peón es una maestra en trenzar puentes entre mundos, vinculando raíces culturales y geográficas con tecnología y vanguardia.
Si acaso, esta colaboración propone ya dos primeros niveles de cuerpo: un cuerpo autobiográfico y otro cuerpo que es abstracto. Quizás en la unión de estos dos cuerpos y a través de ellos encontramos a lo físico y lo anatómico: herramientas de lo empírico que permiten sobrellevar al propio cuerpo hacia un lugar que no es antes ni es después, es un lugar otro y radicalmente propio. Es esta fisicalidad la que puede abrir las puertas hacia el relato de lo que somos por memoria y lo que somos simplemente, en presente. Si en esta aventura autobiográfica el cuerpo recoge aquello que ya estaba, aquellas narraciones de lo que somos y aquellos relatos que han quedado en nosotras, unos relatos que nos ubican, y también si en esta aventura abstracta el cuerpo lanza y escupe memoria futurista y energía vibracional, no podríamos comprender lo que ocurre si no miramos al puente que une ambos procedimientos: lo físico, la membrana y el decibelio, las puertas mecánicas de lo sensible para traspasar mundos y emanciparnos hasta de nuestras propias historias. Diríamos que una se hace a la otra (biografía y abstracción, mujer y mujer). Y para ello, lo primero que tiene que hablar es el cuerpo por sí mismo.
Mercedes Peón afirma que es en la música dónde encontramos una idea de colectividad, de nuestra propia narración, porque primero aprendimos a cantar y luego aprendimos a hablar. El vínculo geográfico y cultural de las dos artistas juega un papel importante, y es en la música de Peón y en el cuerpo de Novás donde el campo gallego resuena con fuerza, a pesar de los años sigue allí y es desde ese espacio propio que las artistas se provocan y se despiertan. Estas mujeres devuelven la mirada a la tierra al juntar sus soledades y autoamplifican sus voces y sus cuerpos en el compartirse con la otra. Los cantos de Mercedes que tan arraigados a los universos campestres del norte, plagados de notas agudas, sujetas en el tiempo, recuerdan a esa forma de comunicarse otrora, a distancias de paisaje las unas de las otras, un sonido agudo vinculado a la memoria colectiva y que al vibrarlo y amplificarlo sale en forma de energía, igual que hace el cuerpo de Janet al transformar esas memorias y vivencias en emoción e imagen, fugas para un cuerpo que baila y transciende gracias a ellas. Quizás este es el espacio que se abre en este espectáculo: el campo de las mujeres y las mujeres que están en el campo, infancias ancestrales que se convierten en futuros chamánicos, y más allá de esto.
Y a lo sumo, podemos decir que no son solo dos cuerpos. Ni únicamente son solo dos disciplinas, dos preguntas, dos instrumentos o dos mujeres. Son más cosas que solo dos cosas. Porque tenemos más cuerpos dentro de nuestros cuerpos, capas vibracionales en repetición (¿qué es el cuerpo sino un suceso de repetición extrema?). Porque el canto y el baile es lo último que nos queda para traer de vuelta los recuerdos, para que estos recuerdos canten y bailen con ellas. Como en un fractal invertido, los recuerdos de la carne se pliegan hacia afuera hasta difuminar la silueta que nos separa del mundo.
Lo que está presente en esta invocación son dos figuras en femenino y en galego, posicionamiento esencial e inevitable que dio camino a las dos artistas. Y es en esta esencia que los cuerpos trascienden más allá de ellos. Porque quizás la consecuencia más básica y más antigua del acto de bailar es estar aquí, en el presente, durante un momento. Y es en este presente continuo y continuado donde se abre el espacio para el encuentro en MERCEDES E EU. Un encuentro de similitudes y de potencias que fabrican lo ancestral, tan ancestral que se vuelve futuro.
Xavier Manubens
– Sobre Lipi Hernández i Mercedes Peón
– Sobre Mercedes Peón
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LOUPPE, L. (2011) Poética de la Danza Contemporánea. Editorial Universidad Salamanca.
– Sobre el primer encuentro de Pandereteiras de España
– Trabajos de Investigación y Creación sobre música tradicional gallega en código abierto
